Adam Gibson, hombre familiar y tradicional, vive en este entorno en el que la tecnología y los avances de la ciencia utilizados sin medida comienzan a desplegar su poder desde la sombra: se trata de la clonación humana, un tabú que poco a poco va ganando adeptos en algunas esferas poderosas de la Tierra. Se ha conseguido mucho y se quiere llegar a más: el mundo en el que vive Gibson es un mundo libre de enfermedades incurables, en el que el hambre ha sido erradicada gracias a los alimentos diseñados genéticamente, y los laboratorios tienen órganos humanos clonados esperando a ser trasplantados. Pero ahora toca jugar a ser Dios. Las únicas trabas que existen son legales: la ley que prohibe la clonación humana se llama "Ley del sexto Día", haciendo referencia al Génesis. Cuando un día Adam Gibson vuelve a su casa para celebrar el cumpleaños de su hija, observa como un hombre exactamente igual a él ocupa su lugar como padre de familia. ¿Qué ha pasado? Claramente le han clonado, y a partir de aquí empieza a cumplirse el lema de la película: "Clonaron al hombre equivocado". Comienza una doble lucha por salvar su vida. Doble porque ahora hay dos Adam Gibson intentando recuperar su verdadera identidad. Al principio hay un rechazo del uno hacia el otro, pero se dan cuenta que lo mejor para solucionar sus problemas es unir sus fuerzas.
Sabías que los productores de la película decidieron cambiarle el nombre de El Sexto Día a El 6º día para evitar confusiones con El Sexto Sentido de M.Night Shyamalan?