El Lobo de Wall Street

Cuando los protagonistas esnifan cocaína, lo que de verdad están tomando es vitamina B triturada

Los golpes de pecho y el tarareo que utiliza el personaje de Matthew McConaughey es un ritual que usa el propio actor antes de interpretar, Leonardo DiCaprio le vio haciéndolo y le animó a plasmarlo en la película. Al final se convirtió en un himno del filme.

En la escena de la pelea entre Leonardo DiCaprio y Margot Robbie está le dio tan fuerte la bofetada que se asustó de haberle hecho demasiado daño. Incluso pensó que podría llegar a demandarle.

En la escena que Brad (Jon Bernthall) golpea a Donnie (Jonah Hill) al primero se le fue de las manos la violencia a usar y aparte de romperle los dientes falsos que llevaba también le propició una hinchazón que Martin Scorsese no dudó en utilizar.

Jordan Belfort instruyó a Leonardo DiCaprio en su comportamiento, especialmente en el modo de reaccionar a las drogas, y mucho más concretamente a los Quaaludes.

Dentro del guión, muchas de las partes de la película fueron improvisadas, siempre con la bendición de Martin Scorsese.

En la escena en la que Donnie (Jonah Hill) se masturba al ver por primera vez a Naomi (Margot Robbie) llevaba una prótesis de pene. Nadie sabía que no era real y todas las reacciones son genuinas.

En la escena del beso entre Leonardo DiCaprio y Joanna Lumley, el actor americano estaba tan nervioso que tuvo que repetirse 27 veces.

En la escena en la que Naomi (Margot Robbie) seduce a Jordan (Leonardo DiCaprio) aparece totalmente desnuda. Martin Scorsese recomendó a Margot llevar una bata, pero ésta se negó alegando que el poder que tiene su personaje es su físico, y debía mostrarse tal cual. Unas copas de tequila antes del rodaje de la escena hicieron el resto.

Desde 2007 que leyó el libro de Jordan Belfort, Leonardo DiCaprio estaba obsesionado con llevarlo a la gran pantalla. Aprovechó el momento actual para utilizarlo como metáfora de las finanzas que nos han llevado a esta crisis. También quiso mostrar el lado honesto y directo de Belfort.

Al utilizar por primera vez los dientes falsos, Jonah Hill no lograba vocalizar como era necesario. Salvo el momento llamando durante dos horas a empresas al azar y hablando con ellas.

Durante la escena del discurso de Steve Maden, Steven Spielberg hacía una visita rutinaria en el estudio. Dice Martin Scorsese que ya que estaba allí le ayudó a dirigirla.

Chris Evans y Joseph Gordon-Levitt hicieron una audición para el papel de Jordan Belfort.

Blake Lively y Rosie Huntington-Whiteley estuvieron en la quiniela para interpretar a Naomi, Teresa Palmer y Amber Heard incluso llegaron a hacer una audición.

Julie Andrews era una de las actrices en las que se pensó para hacer de tía emma, al final se llevó el papel Joanna Lumley.